Síntomas y diagnóstico del cáncer de esófago
Los mejores oncólogos en León, Gto. pueden ofrecerles un diagnóstico y tratamiento adecuado para el cáncer de esófago que afecta al tubo de alimentación por el que se transportan los alimentos desde la garganta hasta el estómago. Este tipo de cáncer afecta principalmente a personas de 60 y 70 años, y es más común en hombres que en mujeres.
Síntomas del cáncer de esófago
El cáncer de esófago generalmente no causa ningún síntoma en las primeras etapas cuando el tumor es pequeño. Es sólo cuando se hace más grande que los síntomas tienden a desarrollarse. Los síntomas del cáncer de esófago pueden incluir:
Dificultad para tragar
El cáncer puede estrechar el esófago, lo que dificulta la transmisión de los alimentos. Puede parecer que la comida se está atascando y, a veces, tragar puede ser incómodo o doloroso. Es posible que tengan que masticar su comida más a fondo sólo poder comer alimentos blandos. Si el tumor continúa creciendo, incluso los líquidos pueden ser difíciles de tragar.
- indigestión persistente o acidez estomacal
- sacar comida poco después de comer
- pérdida de apetito y pérdida de peso
- dolor o molestias en la barriga superior, el pecho o la espalda
- vómitos persistentes
- tos persistente
- ronquera
- cansancio, falta de aliento y piel pálida
- vomitar sangre o toser sangre (aunque esto es poco común)
Cuándo buscar atención médica
Se recomienda consultara un médico cuando se presenta:
- dificultades para tragar
- acidez estomacal la mayoría de los días durante tres semanas o más
- cualquier otro síntoma inusual o persistente
Los síntomas pueden ser causados por varias afecciones y, en muchos casos, no serán causados por el cáncer, pero es una buena idea que los revisen. Si su médico de cabecera cree que necesitan hacerse algunas pruebas, pueden derivarlo a un especialista.
Causas del cáncer de esófago
Se desconoce la causa exacta del cáncer de esófago, pero ciertas cosas pueden aumentar el riesgo de que se desarrolle.
Reflujo ácido
La enfermedad por reflujo gastroesofágico es cuando se presenta una debilidad en los músculos por encima del estómago por la que el ácido del estómago puede viajar hacia el esófago. En aproximadamente una de cada diez personas con enfermedad de reflujo el daño repetido por el ácido del estómago durante muchos años puede eventualmente causar cambios en las células que recubren el esófago, a lo que se le llama esófago de Barrett. Estas células anormales tienen un mayor riesgo de convertirse en cancerosas en el futuro, aunque el riesgo aún es pequeño.
Alcohol
Beber demasiado alcohol irrita e inflama el revestimiento del esófago. Si las células en el revestimiento del esófago se inflaman, es más probable que se vuelvan cancerosas.
Fumar
El humo del tabaco contiene muchas toxinas y productos químicos nocivos. Estas sustancias irritan las células que forman el revestimiento del esófago, lo que aumenta la probabilidad de que se vuelvan cancerosas. Cuanto más tiempo fumen, mayor será su riesgo de desarrollar cáncer de esófago.
Obesidad
Si tienen sobrepeso, su riesgo de desarrollar cáncer de esófago es mayor que las personas con un peso saludable. Esto puede deberse en parte a que las personas con sobrepeso tienen más riesgo de reflujo ácido a largo plazo.
Dieta
No comer suficientes frutas y verduras puede aumentar su riesgo de contraer cáncer de esófago. Por eso se recomienda llevar una dieta saludable y balanceada que incluya al menos cinco porciones de frutas y verduras frescas todos los días.
Otras condiciones médicas
- Ciertas condiciones médicas raras también pueden aumentar sus posibilidades de contraer cáncer de esófago, los que incluyen:
- Acalasia, donde el esófago pierde la capacidad de mover los alimentos, causando vómitos y reflujo ácido
- Síndrome de Paterson-Brown Kelly (también llamado síndrome de Plummer Vinson), una afección que puede causar anemia por deficiencia de hierro y pequeños crecimientos en la garganta
- Tilosis, una afección hereditaria de la piel
Diagnóstico
Un médico les hará preguntas sobre sus síntomas, realizará un examen físico y los puede derivar a un especialista, como un gastroenterólogo o los mejores oncólogos en León, Gto. para un examen y pruebas más minuciosas. Las dos pruebas principales utilizadas para diagnosticar el cáncer de esófago son una endoscopia y una ingestión de bario.
Una endoscopia es un procedimiento que le permite a su médico ver dentro de su esófago para que pueda detectar el cáncer. Se pasa un tubo delgado y flexible con una luz y una cámara al final hacia la boca y hacia el estómago. También se extraen pequeñas muestras de tejido del esófago para que puedan examinarse en busca de cáncer con un microscopio, a lo que se llama biopsia.
Ustedes estarán despiertos mientras se realiza una endoscopia y el procedimiento no debería ser doloroso, pero puede ser un poco incómodo. Normalmente se les administrará anestesia local para adormecer su garganta y posiblemente un sedante para ayudarlos a relajarse.
Una ingestión de bario o una comida de bario implica beber un líquido blanco inofensivo llamado bario antes de tomar varias radiografías. El bario recubre el revestimiento del esófago, por lo que aparece en la radiografía y mostrar si hay algo bloqueando su esófago, lo que puede ser un signo de cáncer.
Esta prueba no se usa para diagnosticar el cáncer de esófago con mucha frecuencia en la actualidad porque la mejor manera de confirmar un diagnóstico es usar muestras de tejido tomadas durante una endoscopia.
Si tienen cáncer de esófago, otras pruebas pueden mostrar qué tan lejos se ha propagado el cáncer para determinar el tratamiento de cáncer en León, Gto. Estas pruebas pueden incluir:
- Una tomografía computarizada: una computadora toma una serie de radiografías y las junta para crear una imagen detallada del interior de su cuerpo
- Una ecografía endoscópica: una pequeña sonda que produce ondas sonoras se pasa por la garganta para crear una imagen del esófago y el área circundante.
- Una tomografía por emisión de positrones: una exploración que puede ayudar a mostrar hasta qué punto se ha propagado el cáncer
- Una cirugía laparoscópica en León, Gto.: un tipo de cirugía de ojo de cerradura realizada con anestesia general en la que se inserta un tubo delgado con una cámara al final a través de un corte en la piel para examinar el área alrededor del esófago.
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